CÓMO LOS PADRES PUEDEN AYUDAR A SUS HIJOS A MANEJAR EL ACOSO EN LA ESCUELA
Cómo prevenir la intimidación?
Los padres, el personal de la escuela y otros adultos, tienen un papel que
desempeñar para prevenir el acoso escolar, ayudando a los niños a entender el acoso escolar. Hable
sobre lo que es el acoso y cómo enfrentarlo de manera segura. Hablen a los niños que el acoso escolar es
inaceptable. Asegúrese de que los niños sepan cómo obtener ayuda.
Mantenga abiertas las líneas de comunicación. Chequee con los niños a menudo sobre cómo se sienten
en el colegio. Escúchelos, conozca a sus amigos, pregunte sobre la escuela y
comprenda sus preocupaciones.
Modele cómo tratar a los demás con amabilidad y respeto.
Cuál es la diferencia entre acoso y peleas entre amigos?
Existen situaciones cotidianas donde un hermano, amigos, vecinos, pueden tener peleas esporádicas
y luego prontamente se reconcilian. Generalmente, esto no es acoso, es un
manejo agresivo de diferencias que generalmente, con la intervención y modelaje
de adultos y la madurez tendera a desaparecer.
Sin embargo,
cuando la agresión ya sea física, psicológica,
cruza la línea, se transforma en hostigamiento y debe frenarse. El hostigamiento es una agresión intencional y sistemática, que se da a nivel físico, verbal o
psicológico. Golpes, empujones, insultos, amenazas y burlas, hasta extorsiones
para conseguir dinero y pertenencias. Algunos niños usan los medios sociales o
los mensajes electrónicos para burlarse de los demás o herir sus sentimientos.
¿Qué pueden hacer los padres? Hablar del tema
incluso si no es un problema presente en la vida familiar, pues estarán haciendo prevención
A veces los niños callan porque saben que no se sentirán apoyados por sus padres. En
muchos casos, padres bien intencionados suelen decir que se defiendan solo o empeorar el
cuadro acosándolos en casa. Si cultivan el contacto estrecho con sus hijos como
parte de la relación con los niños, comprendiendo, en lugar de juzgarlos, en
los casos de acoso, el niño se sentirá
confiado de abrirse sin miedo. Es importante que los padres busquen apoyar a
sus hijos denunciando el acoso con consejeros escolares y dirección de la escuela.
Acá el silencio puede ser muy perjudicial.
Enseñar a sus hijos habilidades sociales,
involucrarlos en actividades extracurriculares donde el niño se sienta bien y
gane autoconfianza, hacer amigos en el colegio y andar en grupos. El niño debe
sentirse 100% apoyado por adultos.
Respecto a las autoridades escolares. Estos deben conocer la situación, ya que ellos tienen los
reglamentos para minimizar o terminar con el acoso. Pueden citar a los padres de los
acosadores y tomar medidas.
Otro elemento muy importante son los espectadores del acoso. Muy importante la concientización de que
la audiencia que gana el agresor refuerza el acoso. Si pierde la audiencia,
pierde poder. Los niños espectadores deben aprender en lugar de azuzar la
agresión o grabarla, denunciarla y apoyar al agredido. Se ha comprobado que al lograr que los
testigos actúen en favor del agredido, el acosador suele perder interés en su
sistemática agresión.
¿Qué hacer con el niño que no habla?
El niño que no habla, debe ser observado, pues él está igualmente
comunicando siempre lo que le está ocurriendo a través de síntomas. Observar si
está mostrando baja autoestima,
desaliento, no siente interés por los estudios, miedos en relación al colegio y
sus actividades, mal dormir, drásticos cambios emocionales (agresión,
aislamiento), ansiedad, moretones en cara
cuerpo, Aislamiento en actividades en el colegio y a veces en casa.
Siempre la ayuda de un profesional puede proveer de herramientas efectivas para que
los padres sepan como actuar bajo estas circunstancias. En el caso de que exista depresión
o pensamientos suicidas, los cuales son los extremos de la indefensión, recomiendo
la intervención de un psicólogo clínico. El sabrá si es necesario hacerlo ver
con un psiquiatra.
En resumen, mantenga abiertas las líneas de comunicación. La investigación
nos dice que los niños realmente buscan a los padres y cuidadores para obtener
consejos y ayuda en las decisiones difíciles. A veces, pasar 15 minutos al día
hablando puede tranquilizar a los niños de que pueden hablar con sus padres si
tienen un problema. Comience conversaciones sobre la vida diaria y los sentimientos
con preguntas como estas:
¿Qué fue una cosa buena que sucedió hoy? ¿Alguna mala cosa?
¿Cómo es la hora del almuerzo en tu escuela? ¿Con quién te sientas? ¿De que
hablas?
¿Cómo es viajar en el autobús escolar?
En qué eres bueno? ¿Qué es lo que más te gusta de ti?
Hablar sobre el acoso escolar directamente es un paso importante para
entender cómo el problema podría estar afectando a los niños. No hay respuestas
correctas o incorrectas para estas preguntas, pero es importante alentar a los
niños a responderlas honestamente. Asegúreles a los niños que no están solos para
abordar cualquier problema que surja.
Hay maneras sencillas en que los padres y cuidadores pueden mantenerse al día
con las vidas de los niños.
Lea los boletines de la clase y volantes de la escuela. Habla de ellos en
casa.
Visite el sitio web de la escuela
Ir a eventos escolares
Saluda al conductor del autobús
Conozca a los maestros y consejeros o comuníquese por correo electrónico
Compartir números de teléfono con los padres de otros niños.
Estas acciones ayudarán a sus hijos a sentirse apoyados, comprendido y
confiados.
Yármila Durand.
Si estas interesado en tener una cita conmigo, comunícate al 305 987 5361 o a mi correo: durand70@gmail.com. Con gusto respondere a tu llamada a la brevedad posible.